La vida de Apik era muy tranquila hasta que debieron mudarse a la ciudad. Al principio no podía encontrar la serenidad que le brindaba su anterior hogar, hasta que pudo comprender que la paz se encontraba dentro de él.
Carmela nunca puede disfrutar de las cosas que hace, siempre pensando que no le salen bien; ya que busca una inalcanzable perfección. Su amigo Lupa le va a mostrar otra manera de ver y pensar las cosas, ayudándola a disfrutar, con otra actitud ante la vida.
A veces, sin querer, nos metemos en problemas. En esta historia, los kukitos tendrán que enfrentar un gran lío, y ver de qué manera podrán resolverlo entre todos.
A Osko todo le sale bien y por eso muchas veces se cree mejor que sus amigos. Este orgullo desmedido le trae problemas. ¿Podrá con ayuda de sus amigos encontrar su lugar?
En vísperas de Navidad, Ham sale de paseo con su mamá y se le ocurre una gran idea: honrar a los miembros de su familia con un regalo especial. ¡Qué alegría tendrán!
Luego de haber destruido por descuido un proyecto de ciencias de su hermano, Binki deberá enfrentar la culpa que esto le genera. No le resultará fácil; pero, sin duda, peor será permanecer en silencio y permitir que culpen a su perro Tufo, por algo que él no hizo.
El hermano de Keti sufre un accidente. A partir de ese momento ella tendrá que soportar los celos, ya que toda la atención de sus padres girará en torno a él.
Por querer pertenecer a un grupo de amigas “populares”, Teki permite que suban a la web una foto en donde se ridiculiza a Frola, su amiga del alma. En ese momento no reparó en las consecuencias que esto tendría…